Shrek 2: por qué es

Las segundas partes siempre son complicadas, sobre todo si la primera entrega fue un éxito mundial en crítica y taquilla. Ni hablar si ganó el Oscar a la mejor película de animación. Son pocas las secuelas que están a la altura de su predecesora: Terminator 2 (1991), Star Wars: El Imperio Contraataca (1980), Batman: El Caballero de la Noche (2008) y no mucho más. Pero hay una cinta animada que se sienta en la misma mesa de estas destacadas continuación. Sí, nos ponemos de pié para hablar de la gloriosa Shrek 2 (2004).

Esta obra de arte se codea con las más icónicas gemas pop gracias a su característico humor, el maridaje perfecto entre los personajes originales y los nuevos (¿cómo olvidar al increíble Gato con Botas?), y una serie de virtudes más de la que a continuación te hablamos. Prepárate, porque te diremos, según nuestro juicio, por qué Shrek 2 es la mejor secuela de la saga.

Pero antes, si te preguntas dónde ver Shrek 2 online, recuerda que puedes hacerlo cuando quieras en VTR+. ¡Aprovecha tu plan de televisión y disfruta de la emocionante aventura del querido ogro en Muy Muy Lejano!

Guiños por todos lados

Tanto en Shrek 1 como en esta segunda parte, las referencias cinematográficas son exquisitas e incontables. El momento cuando la galletita de jengibre se convierte en una colosal galleta de 10 metros de altura nos recuerda al clásico Frankenstein. Un momento brillante que da inicio a una de las secuencias finales más entretenidas del film.

Otro momento épico se produce cuando la mayoría de personajes de Shrek 2 van a liberar al Gato con botas, al Burro convertido en semental y a Shrek convertido en príncipe de las mazmorras del castillo. Con Pinocho encabezando el operativo al mejor estilo Tom Cruise en Misión Imposible, todo se vuelve risas cuando se enreda y descubren que su ropa interior es una tanga. ¡Lindo conjunto, Pinocho!

El Gato con botas recogiendo su sombrero a lo Indiana Jones, o el acrobático y romántico beso entre Shrek y Fiona durante su luna de miel, homenajeando al arácnido Peter Parker y Mary Jane en Spider-man, son algunos de los tantos momentos geniales que homenajean a otras joyas del cine. ¡Si eres fan de las películas, no habrás pasado por alto estos increíbles guiños!

El Gato con botas

¿Alguna vez han visto un gatito más tierno en la pantalla grande? ¡Estamos seguros que no! Sin embargo, esa sola es una de sus facetas. Así como pone esa cara de gatito mojado, también es un maestro de la esgrima con su pequeña y afilada espada. De ladrón y villano a ladero de Shrek y famosísimo meme. ¡La ternura es total!

Con la voz de Antonio Banderas, este personaje se convirtió en uno de los preferidos de los fanáticos. Tanto que logró avanzar con un spin-off que ya cuenta con dos películas. De hecho, luego de la segunda entrega de esta nueva saga, las escenas post créditos muestran algunos detalles que podrían indicar una nueva película de Shrek. Solo queda esperar a que suceda el milagro y disfrutar de estos personajes emblemáticos. Pero en resumen, el Gato con botas suma muchos puntos a esta segunda entrega como para considerarla la best of the best de Shrek.

Villanos a la altura de la historia

Toda historia de aventuras debe contar con un villano con personalidad. Y esta vez, la maquiavélica Hada Madrina logró ese estatus con creces. El hada madrina y su arrogante hijo, el Príncipe Encantador, tienen grandes momentos. Especialmente ella, durante el final de la película.

Todos recordarán esa secuencia con el Hada Madrina cantando I Need a Hero, en el casamiento de su hijo y Fiona, convertida en humana. Shrek corre a máxima velocidad para intervenir y evitar que se besen y que el hechizo surta efecto por toda la eternidad. Momentos inolvidables, de un timing asombroso, donde finalmente todo se soluciona y triunfa el verdadero amor. Lo intentaste, Hada Madrina, y casi casi lo logras, ¡pero el amor vence al odio siempre!

Un soundtrack inolvidable

Como el momento que mencionamos con I Need a Hero de Bonnie Tyler, Shrek 2 cuenta con una buena cuota sonora. Suenan temazos como Accidentally in Love de Counting Crows y, para cerrar, la genial Living la Vida Loca de don Ricky Martin.

Sin esa canción, el cierre no sería el mismo. Se trata de un momento épico que funciona en todos los niveles con una precisión y detalle asombrosos. Para ver en loop una y otra vez y disfrutar de esta segunda película, que en nuestra humilde opinión, es incluso más sensacional que la primera. Y tú, ¿qué opinas?